Hay características únicas de cada personaje de ficción que les identifica. Con ejemplos tan claros como el sombrero de Indiana Jones o el puro de Hanníbal del equipo A, se puede apreciar el efecto objeto. ¿A qué me refiero con el efecto objeto? Pues se puede definir como esa relación que existe entre un objeto determinado y el personaje en sí, de ese modo cuando vemos un sombrero marrón o un látigo, lo primero que nos viene a la mente es relacionarlo con Indiana Jones (yo de pequeño quería ser arqueólogo, hasta que me di cuenta de lo que era un arqueólogo en la vida real y se me quitaron las ganas…).

Un detalle que se suele ver a menudo en el cine es el alcohol,. Sí, el alcohol, me refiero a ese líquido que nos provoca más de una situación de la que todavía nos arrepentimos. Si os fijáis bien, hay personajes que son recordados no sólo por sus características, ni por sus gestos; son más bien reconocidos por lo que piden en el bar. Así que hoy os traigo los curiosos personajes que basaron sus características en una pequeña e insignificante copa.

Soy fan de James Bond, he de reconocerlo. Desde pequeño siempre quise ser como el agente secreto, me encantaba su estilo, su arte, su modo de resolver los problemas casi sin despeinarse. Uno de esos héroes que se ven inalcanzables pero que siempre has deseado imitar.

Pues resulta que el famoso espía que creó Ian Fleming en sus novelas siempre bebía lo mismo: Martini con Vodka, mezclado no agitado…Y la verdad, es importante el detalle de mezclado, porque si tu agitas el cocktail, lo meneas varias veces arriba y abajo. En cambio, mezclado consiste en un solo meneo, ni uno más ni uno menos, Arrida, abajo y listo.

Aunque a lo largo de los años, la bebida suele variarse a menudo. De hecho en algunos casos lo pide agitado, mezclado e incluso seco y en su punto. A continuación os dejo un vídeo con todas las bebidas que pidió el personaje en sus películas. De todas las variantes de la bebida, la mejor sin duda, la de Casino Royale.

Desgraciadamente, no siempre fue así, ya que en ciertas películas destrozaron el mito de una manera atroz. En la película Licencia para Matar de Thimoty Dalton los guionistas se olvidaron de esta famosa costumbre y decidieron “innovar”; ya que en una escena en la que el intrépido agente trata de conquistar a una chica; pide ni más ni menos que ¡una maldita cerveza con lima!. Cierto, habéis leído bien, ¡cerveza con lima! De hecho, en le escena la chica pide: ”cerveza con lima”, y el Bond de Dalton le acompaña con: ”lo mismo” ¿En serio?¿Qué te hemos hecho, Timothy?. Menos mal que ahora se redimió con Penny Dreadfull (¿todavía no la habéis visto esta serie?¿A qué estáis esperando? Se entera la teniente Alice que no visteis su serie favorita y le da algo).

Todos recordamos Casablanca. Mientras Sam tocaba la famosa canción otra vez; Rick, el protagonista interpretado por Bogart, estaba siempre acompañado de un vaso de whisky ¿Qué marca es la que suele beber? Que más da eso, lo importante era tener el vaso lleno… El caso es que en todas las películas del mítico actor siempre había un vaso de whisky en sus manos, ya que era un acompañamiento para el personaje ¿Y eso porqué? Pues muy sencillo… Resulta que una vez un profesor muy sabio me contó que era porque en aquella época los actores no sabían que hacer con las manos mientras actuaban; por esa razón solían llevar un vaso de whisky o un puro (¿Acaso creíais que lo de el puro de Hannibal había sido cosa suya?).

Aún así, a pesar de todo, cada personaje que se precie de Bogart (he dicho que se precie, separo a los que no…) lleva un vaso de whisky en su mano, o un cigarro, nunca estará con las manos vacías. Fijaos en Casablanca, que siempre tenía un vaso en su mano (evidentemente, en la escena final del aeropuerto no, que la historia tiene que tener sentido). Por cierto, algún día hablaremos de este maravilloso actor…que no sólo era un gran profesional, sino que llegó a ser un estilo en si mismo.

Cuando el vino blanco ha sido secuestrado por la típica mujer americana

No me diréis que nunca habéis visto una película típica americana en la que la mujer solitaria que se dedica a pasearse por su casa siempre suele relajarse con un vaso de vino, generalmente blanco, aunque en ciertos casos tinto. Es algo muy típico de las películas esas que echan por las tardes en antena 3, generalmente la chica suele estar acompañado de una copa de vino blanco en su lujosa casa justo antes de que aparezca el típico ex amante que llega decidido a vengarse.

¿En serio no hay otra manera mejor de liberarse que tomar un vaso de un vino blanco americano? No me quiero ni imaginar como sabe eso. Mientras un hombre suele ir acompañado de un vaso de whisky o una cerveza, la mujer del cine siempre necesita acariciar una copa llena de ese vino que guarda en su despensa para los momentos de relax. Os reto a que me digáis alguna película en la que la típica ama de casa pasa todo el filme sin probar una gota de vino. Son escenas míticas del cine, eso no se puede cambiar…

¿Quien no recuerda al nota? El personaje principal de esa maravilla creada por los Cohen; El Gran Lebowsky. Si no has visto la película, ya estás tardando… En cambio, si la viste, sabes que la bebida que siempre tomaba el protagonista era un Ruso Blanco, una de esos cocktails extraños que la gente pide solo por hacer la gracia de la película (culpable, lo reconozco….). El caso es que, según he leído, ese personaje se basaba en un amigo de la universidad de los directores, y realmente el consumía esa peculiar mezcla. Por cierto, no es nada fácil de hacer, porque lleva leche y esta se puede cortar. Pero si conseguís que el cocktail os salga, disfrutadlo, porque está buenísimo. A continuación os dejo un vídeo que os explica paso a paso su preparación.

A pesar de todo, esa comedia absurda que tanto le gusta a los famosos directores, llegó a crear un personaje único que siempre se reconoció por esa bebida blanca.

Bueno, creo que os he dado cuatro curiosidades en las que podéis pensar. A partir de ahora tenéis que fijaros en la copa que bebe cada actor en una película, porque más que una bebida, puede significar una característica única del personaje (sin duda, el de James Bond es el más claro).

Os dejo que me tengo que preparar un Ruso Blanco para mi y un Vodka con Martini mezclado no agitado para mi amigo invisible (si es que al final me la acabo bebiendo yo, así me pasa que escribo estas cosas…)

Que tengáis una larga vida, a ver si en el futuro acaban por descubrir la inmortalidad…