La hija del txakurra de José Alfonso Romero P.Seguín, aborda la actividad criminal de ETA desde el punto de vista humano, mostrando las heridas de sus víctimas directas e indirectas y empleando como enlace atentados reales.

  El libro es un compendio de 11 relatos en los que se entrelazan atentados reales de ETA con historias ficticias cargadas de sensibilidad y cuyos protagonistas muestran las terribles heridas que dejan en el alma una violencia que, a ojos del autor, nunca justificó sesgar proyectos de vida, destrozar familias y dejar traumatizada a una sociedad que vivía en la dictadura del terror. 

 “La hija del txakurra” no es un libro más sobre el conflicto de ETA porque está despojado de cualquier intento de buscar culpables y en ningún caso habla desde el odio de quien sufrió en sus propias carnes la violencia y el miedo. Simplemente el autor ha utilizado su experiencia y el contacto directo que tuvo con aquella sociedad que vivió la dictadura del terror para saldar una deuda con las víctimas, directas e indirectas. Para recordar, utilizando todo el abanico de sentimientos propios de la humanidad, que se ponía fin a la vida de un marido, un padre, un hijo, un vecino… O de un niño inocente que un día chutó un paquete bomba en una acera. Para ello se pone en la piel de la viuda de un guardia, la hija de un "txakurra”, (apelativo con se referían a los Guardias Civiles y Policías), un entrenador de fútbol infantil, el dueño de un bar, un repartidor, una emigrante, etc.

Para entender su motivación, el autor, de origen gallego, explica que uno de los triunfos de la banda terrorista fue lograr despojar a los agentes, por ejemplo, de toda atisbo de humanidad para hacer más digerible el asesinato de, al fin y al cabo, un ser humano. No obstante, también es crítico con el aparato del Estado que denominaba a los agentes con números, logrando la misma sensación, y va más allá. El exagente explica que les convertía en héroes, superhombres, lo que también les alejaba de recibir la lógica compasión de la sociedad y, de hecho, rechaza rotundamente tal calificación. Frases como “algo habrá hecho” eran un continuo tras un atentado en aquellos tiempos de terror en los que la sociedad vasca también era una víctima que vivía con miedo a ser el próximo objetivo porque, como él mismo recuerda, los civiles también fueron objeto de las balas y los paquetes bomba y testigos presenciales de actos tan violentos que hacen mella en la vida de cualquier persona.

El libro es producto de más de 20 años de reflexión y de descarga emocional sosegada del autor, cuya vivencia también lo acabó apartando del cuerpo y que aún hoy arrastra las consecuencias de haber vivido entre miedo y dolor. Cuando llegó al País Vasco era un joven de 19 años y la literatura ha sido para él una vía de escape. De hecho, es un prolijo autor que cuenta en su haber con novelas, cuentos, relatos y poesía de variada temática, pero “La hija del txakurra” cobra especial importancia por aportar una óptica diferente a uno de los pasajes más terribles de la historia de España. Además forma parte de la corriente de libros autoeditados mediante crowdfunding, con la editorial Libros.com, y ha tenido gran acogida en los lugares donde ya se ha presentado. Salió a la venta en noviembre de 2015 y se ha presentado en Ourense y Melilla, Vitoria y próximamente lo hará en la Cátedra de Historia Contemporánea de Santiago de Compostela.

Fragmento del relato que da título al libro.