Madres paralelas, el nuevo trabajo de nuestro oscarizado Pedro Almodóvar era la encargada de abrir el certamen y de llenar de glamur las alfombras rojas de la ciudad italiana con la presencia de estrellas de la talla de Penélope Cruz, quien coprotagoniza este nuevo título del director de Todo sobre mi madre junto con la actriz Milena Smith y otros reconocidos rostros como Israel Elejalde, Aitana Sánchez-Gijón, Rossy de Palma o Julieta Serrano.

Pero aparte del acontecimiento de ver un film español inaugurar uno de los festivales europeos de mayor prestigio del mundo, el evento suponía el primer enfrentamiento de lo nuevo de Almodóvar frente a la industria y la prensa especializada, un paso clave para determinar si el manchego volvería a conquistar y a meterse de lleno en la próxima carrera a los Oscar 2022.

Y las primeras reacciones parecen anticipar que estaremos ante una clara contendiente a llevarse la estatuilla dorada (si la Academia española la elige representante).

En primer lugar, el buen sabor de boca que dejó Madres paralelas se pudo ver tras su pase en la gala inaugural del Festival de Venecia. Según han reportado varios periodistas y asistentes a la velada, tras finalizar la proyección todo el público se puso en pie y ovacionó a Pedro Almodóvar, Penélope Cruz, Milena Smith y al resto de equipo de la película, un clamor que se extendió hasta los cinco minutos. Pero sobre todo, la buena recepción que obtuvo el nuevo trabajo del cineasta español se apreció en las críticas que fueron publicadas tras el pase. 

Llaman la atención textos como el de Variety, que ya desde su titular se atreve a calificar a Madres paralelas como “La mejor película de Pedro Almodóvar desde Todo sobre mi madre”. Se tratan de palabras mayores, puesto que desde que el manchego estrenara esta cinta que le valió el Oscar en la temporada de 1999 nos ha ofrecido otras aclamadas obras como Hable con ella, La mala educación, Volver, La piel que habito, Julieta o Dolor y gloria.

El crítico Owen Gleiberman, responsable de dicha reseña, habla de que Almodóvar “deja atrás el camp y la ironía para contar la historia luminosa pero realista de dos mujeres que navegan por la alegría y el dolor de la maternidad”, definiendo Madres paralelas como “una película descaradamente seria, sencillamente esculpida y emocionalmente realista” que logra que “no haya distancia entre el público y lo que sucede en pantalla”.

Además, como bien ocurre con frecuencia en el cine del manchego, también resalta una “dimensión política bastante poderosa”, hablando de una cinta con “un aullido de rabia y una exposición de las atrocidades del régimen de Franco”.

Y es que tras este fuerte recibimiento, Madres paralelas no solo se postula como una de las favoritas en la carrera a los Oscar en categorías como la de Mejor película extranjera, sino que a Penélope Cruz se le presenta otra oportunidad de acercarse a su segunda estatuilla dorada.

Sobre todo teniendo en cuenta que antes del estreno de la película medios como Variety ya la situaban como una de las favoritas a Mejor actriz junto a intérpretes como Kristen Stewart, Lady Gaga, Olivia Colman o Jessica Chastain.