La indomable de Hollywood vuelve en 'El universo de Katharine Hepburn'

Un libro colectivo descubre el significado complejo del cine de la actriz estadounidense

"Kate es la persona más excéntrica que conozco, pero lo más excéntrico de ella es que piensa que es normal". La frase de George Cukor aparece en un rincón de El universo de Katharine Hepburn (Notorious), y marca las contradicciones del retrato complejo, a veces encantador y a veces solitario, que los 25 coautores del libro hacen de la actriz más singular de su tiempo.

¿Qué es El universo de Katharine Hepburn?

Los lectores del sello Notorious conocen el formato. La primera parte del libro es un conjunto de artículos, clasificados e ilustrados, sobre cada película de Hepburn (Connecticut, 1907-2003), desde las que le ganaron sus cuatro Oscar hasta las apariciones sin acreditar y los telefilmes crepusculares. La idea es que, en el fondo, van más allá de su objeto y retratan a la actriz en relación con los temas de su tiempo. Así, por ejemplo, el capítulo sobre El estado de la Unión (Frank Capra, 1949), escrito por Quim Casas, explica la posición moral de Hepburn y su entonces ya pareja, Spencer Tracy, en el marco moral de su época.

La segunda mitad del libro es un diccionario de ideas y personas que rodean la historia de Hepburn y que explican su personalidad. Aristocracia, Manhattan, Actores británicos, Thomas Hepburn y Cate Blanchet son algunas de las entradas del glosario que firma Lucía Tello. Entre unos textos y otros, la imagen que construyen de Hepburn va mucho más allá que la de la diva rebelde que se suele manejar.

Hay una idea importante que entender sobre Katharine Hepburn: cuando nació para la industria del espectáculo, su personalidad ya estaba hecha: desafiante, rebelde, moral y elitista a la vez. "Su personalidad estaba hecha a la contra. Hepburn era lo contrario a la estrella rubia platino de Hollywood", explica Guillermo Balmori, el editor de Notorious.

Al principio, a la actriz le costó mucho encajar pese a tener los mejores respaldos posibles. "La RKO la descubrió y apostó por ella con muchísima paciencia. Entre 1932 y 1938 le dio papeles importantes, pero el público le dio la espalda sistemáticamente. La percibía comodemasiado progresista, demasiado feminista y demasiado desdeñosa para sus gustos. En su tercera película, Gloria de un día, estrenada en 1933, ganó su primer Óscar a mejor actriz. Pero ni siquiera eso le ganó el favor de la industia. "Sus colegas la llamaban 'veneno para la taquilla'", cuenta Balmori.

En 1938, RKO se dio por vencida y Hepburn volvió al teatro, un refugio en el que el público sí le era propicio. Se encontró con un texto escrito a su medida, Historias de Filadelfia, triunfó en Nueva York con él en Nueva York, compró sus derecho y, cuando la Metro Goldwyn Mayer quiso rodar la obra, maniobró para conseguir una nueva oportunidad en el cine.

En el artículo dedicado a Historias de Filadelfia aparece por primera vez la palabra "feminismo", que es un concepto muy atractivo para abordar la historia de Katharine Hepburn desde una óptica contemporánea. La hipótesis que surge de El universo de Katharine Hepburn es que la actriz, hija y nieta de mujeres adelantadas a su tiempo, universitaria y nudista, no hizo proselitismo expreso de sus ideas. Simplemente estuvo con su manera de ser, con su manera de no necesitar a nadie, ni siquiera a John Wayne en sus películas de vaqueros.