“La sombra de Gaudí” llega en marzo

Muchos sabéis que la publicación de “La sombra de Gaudí” pasó por multitud de vicisitudes. Los que habéis seguido su trayectoria desde que anuncié por primera vez la publicación a principios de 2013, debéis estar algo desconcertados, ya que en aquella ocasión comenté que pronto podría anunciar la fecha de salida. Mientras, me invitaron a algunos programas radiofónicos y blogs amigos, en los que tuve la oportunidad de hablar sobre ello.

Entusiasmada de ver que mi segunda novela se abría paso, comencé un blog sobre Antoni Gaudí en enero. Pero la prisa es mala consejera, y antes de firmar contrato con la editorial que me había ofrecido la oportunidad de publicarme, me surgió otra, incierta, que parecía más promisoria. Fue una decisión difícil, pero fiel a mi convicción sobre la importancia de la paciencia y de saber esperar el mejor momento para publicar nuestro libro, preferí declinar la oferta de la primera editorial, para esperar una respuesta de la segunda, que no me había prometido nada, pero me había ofrecido un hilo de esperanza y después de una primera lectura, procedimos a mejorar algunos aspectos del manuscrito. Mientras, creé otro blog literario (donde escribo ahora estas líneas), en el que comencé a compartir algunas reflexiones sobre la literatura, las editoriales, las agencias, e incluso, explicaciones sobre qué estaba pasando con “La sombra de Gaudí”.

Sin embargo, y después de ¡cuatro meses de espera!, esta joven pero pujante editorial me confirmaba que por motivos de presupuesto, no podrían publicarme hasta pasado el 2015… No podía sentirme peor, no tanto por mí misma, sino por el mal paso de haber anunciado una publicación que era una posibilidad, y no un hecho. La desilusión fue inmensa, el desánimo, el mismo que me había acompañado durante todo el 2013 (durante el cual tampoco se definían otros proyectos), se multiplicó por veinte. Os prometo que casi tiro la toalla. A punto estuve de olvidarme de los libros, y la verdad es que pasé varios días sumergida en un sopor extraño, sin saber cómo reaccionar.

Aún así, pasada casi una semana, seguí pidiendo direcciones y contactos. Sin grandes ilusiones (éstas ya se habían esfumado, y apenas campaba una niebla oscura de esperanza), me decidí a enviar el manuscrito así, sin más, sin unas palabras, sin la sinopsis, empleando el mínimo esfuerzo (o sea, sin hacer caso a mis propios consejos), a dos pequeñas editoriales; tal era el desánimo, la resignación. Pero cuando las cosas tienen que ser, son, y en pocos días llegaron dos respuestas. Fue increíble. Fue, sin riesgo a exagerar, como volver a respirar.

La ráfaga de aire puro se llama Editorial Seleer, una pequeña y joven editorial, que me brindó una oportunidad. No sé qué pasará con la vida de “La sombra de Gaudí” a partir de ahora, pero lo que sí sé es que estoy doblemente agradecida: con Seleer, que a pesar de los tiempos que corren, decidió confiar en mí y apoyarme con ésta, mi segunda novela, que espero sinceramente os guste, y con vosotros, amigos y lectores, por la paciencia y comprensión. Espero que haya valido la pena esta larga espera, y el riesgo de Seleer de publicar a una perfecta desconocida como vuestra humilde servidora, se vea recompensado. Muchas gracias a todos.

Mi Blog Literario

Alex, 27 enero 2014