'Birdman' ha sido la gran triunfadora de los Oscar 2015. Partía con nueve nominaciones y se ha marchado con cuatro premios, incluidos los pesos pesados de guión, fotografía, dirección y mejor película. Iñárritu le ha puesto sabor mexicano a la noche. Éstas son las claves de la película del año:

Alejandro González Iñárritu estaba deprimido. No le veía sentido a su trabajo.

Hasta que se le apareció 'el pájaro'. "Nada me entusiasmaba. Ni siquiera trabajar. Sentía que estaba haciendo siempre el mismo proceso, encarándolo todo del mismo modo desde el principio de mi carrera. Cuando estás cómodo con lo que haces, el miedo desaparece y, de alguna forma, te sientes vacío", confesó en una entrevista.

Hacer 'Birdman' fue su revulsivo: se la jugó a todo o nada grabando en largos planos secuencia. "Fue una forma de terapia. No puedes volver a hacer la misma toma una y otra vez hasta que quede perfecto; no puedes disimular una mala actuación ni arreglarlo en la sala de montaje. Rodar como rodamos te obliga a ser mucho más honesto con tu trabajo. Éramos como una banda tocando en vivo. Una sola duda, un solo error y había que tirarlo todo y empezar de nuevo. Era un desafío". Depresión curada.

El paralelismo entre el protagonista de 'Birdman', Riggan Thomson, y MIchael Keaton es evidente: el actor impulsó el género de superhéroes al encarnar al Batman de Tim Burton en 1989 y 1992. Después Keaton dejó la saga y fue desapareciendo de la industria . En los últimos años se había limitado a papeles secundarios en películas como 'Policías de repuesto' (2010) y 'Need for speed' (2014), o a ser la voz de Ken en 'Toy Story 3'. 'Birdman' es su primer papel protagonista en seis años, desde 'The Merry Gentleman', que él mismo dirigió y terminó en un juicio con la productora.

Cuando se le pregunta por qué se alejó de la industria alega razones personales -crió solo a su hijo tras separarse de la madre- y profesionales -papeles que le aburrían-. 

Todos estos años ha vivido de forma espartana en su rancho en Pensilvania, pero ahora parece que ha vuelto: acaba de terminar otra película, 'Spotlight', un drama junto a Mark Ruffalo. "La voz de mi cabeza se está volviendo un poco loca. Me dice 'Si le hubieras dicho no a 'Spotlight', podrías haberte tomado un descanso. Todo lo que tenías que hacer era decir no y podrías estar descansando ahora'. Te das cuenta de que estás entrando de nuevo en esa espiral descendente. No te queda otra que reírte. Oh, sí, estoy haciendo esta locura de nuevo", ha declarado a 'The Guardian'. Bien metido en su papel.

El protagonista de 'Birdman' confía en la película en un cuento de Raymond Carver (1938-1988), ¿De qué hablamos cuando hablamos de amor?, para remontar su carrera y su reputación. Es la obra con la que intenta triunfar en Broadway.

La idea surgió en 2012, cuando Iñárritu estaba preparando el guión via Skype desde Los Ángeles con Armando Bo y Nicolás Giacobone en Buenos Aires y Alexander Dinelaris en Nueva York. 

Fue entonces cuando el mexicano se cruzó con Carver. "Alejandro tuvo una fuerte reacción a su obra. Nos dijo que le habían encantado las concepciones de Carver sobre el amor al otro y a uno mismo. Creyó que sería un buen argumento para el guión, sobre todo para el protagonista. Así fue como surgió Riggan Thomson y su necesidad de sentirse amado, recordado y respetado. Luego vino su alter ego, el héroe pájaro, en oposición directa a su búsqueda quijotesca. De una u otra forma, los personajes de la película siempre están buscando amor", ha contado Dineralis.

Michael Keaton y Edward Norton

Según los críticos norteamericanos, el texto que ha usado Iñárritu no pertenece a la versión original del escritor: eligió el texto editado por Gordon Lish, quien se caracterizó por recortar de forma significativa los cuentos de Carver. La versión original se llama 'Beginners' y es superior a la adaptación de Lish, aseguran.

El rodaje duró 29 días y se centró en el teatro St. James de Nueva York, a unos metros de Times Square. Antes se ensayó durante un mes en Los Ángeles como si se tratase de una coreografía para que nada fallase en los largos planos secuencia. El presupuesto fueron 22 millones de dólares, muy reducido para el mercado americano, y la taquilla estadounidense rondó los 26 millones. A 10 de enero de 2015, la recaudación mundial era de 30 millones de dólares.

El responsable de que toda la película parezca un solo plano secuencia -se aprecian 16 cortes- es el director de fotografía mexicano Emmanuel Lubezki, ganador de un Oscar por 'Gravity", de Alfonso Cuaron, que consiguió a su vez el Oscar a mejor director el año pasado. Lubezki ha repetido como ganador e Iñárritu ha sido el segundo cineasta mexicano consecutivo que logra la estatuilla.