Con El pasé el verano narrated by Pirlo de Félix

Con la mente en blanco no se pueden escribir ni dos líneas, con la mente en blanco tampoco tengo disgustos esto es así ya que no pienso en nada, no tengo ninguna necesitad, no tengo ningún deseo ni tampoco ningún objetivo que cumplir.

Sencillamente decir que quería volver a escribir, pero no sabía por donde empezar, así sin más he empezado este post describiendo mi estado mental, en el que me encuentro hoy, y ahora también añadiré que mi alma se encuentra tranquila, justo al revés de cómo debe tenerla un escritor profesional debe tener una mente que le cree unos problemas y de unas soluciones y con un alma inquieta que no tenga una mente y mi alma ambas en estado de languidez como si estuviera ya sentado a la derecha del padre en el mundo infinito, notando ya su cariño hacia mí antes de que mi alma se junte con la de El, estando aún mi cuerpo en este mundo-infierno el más bajo de todos, el mundo terrestre.

Un escritor inventa y cuenta historias crea y destruye personajes, yo simplemente escribo como recurso terapéutico, me reporta mucho placer el escribir, no pienso en nada, ni en nadie, de forma concreta, pero tampoco quiero ser un escritor abstracto, ni tampoco hacer un texto amorfo.

Este texto tiene una razón de ser, mis ganas de escribir y tiene un objetivo la satisfacción que me reporta después de haberlo escrito, pero tengo que dejar una idea clara, que al lector que vaya a leer este post le deje una buena impresión, el haber compartido unos minutos conmigo, haber estado unos minutos con la mente en blanco, fuera de los problemas de este mundo material y físico, quiero llegar al lector a través del mundo espiritual e inmaterial, quiero llegar hasta lo más profundo de su sentimiento quisiera deprimir tu mente y tu alma, hasta el punto que no pienses si tengas ningún deseo mundano, para que consigas la paz que yo he conseguido.

Qué es un texto amorfo o abstracto no es otra cosa que un escrito donde no entiendes nada, porque no explica nada, no hay concreción sobre una idea que te puedas llevar a tu interior, y pensar que ha valido la pena pasar cinco minutos leyendo este texto, y es amorfo porque no tiene forma escrita válida con la que puedas compararlo con alguna otra forma de escrito estas líneas forma parte de un post y esa es la forma a través de la cual me comunico contigo, a través de este post y de las palabras que aquí escribo.

Este es el primer post que escribo desde hace tres meses, junio, julio y agosto, durante este tiempo he estado de vacaciones, tomando refrescos, paseando en coche y buscando sombras en las placetas, o dentro de las cafeterías, al lado del aire acondicionado.

Mi despacho es el lugar donde se me ocurren estas cosas de escribir pero en estos meses de verano, hace tanta calor que es mejor no hacer nada, ni tan siquiera entrar, ni tratar de enchufar la computadora ya que por el calor y el esfuerzo psíquico que he de hacer para realizar mis estudios y proyectos mi cerebro se evaporaría.

Con la mente en blanco, con el alma tranquila con el flujo de pensamiento volviendo a fluir en mi cerebro, vuelvo a escribir, una vez han pasado los rigores del verano, además el calor ataca a mi organismo de tal modo que se generan en mí pensamientos desacordes mí alma tranquila y una mente en blanco sin pensamiento concreto, solo en un estado de languidez.

El estado lánguido de mi mente y mi alma son el resultado de no crearme problemas y de leer muchos libros escritos por escritores que tenían una fe verdadera y un objetivo concreto, llevarnos hasta el conocimiento del creador y propietario de mí alma, ser con el que tengo ratos de diálogos desde el sofá de mi casa, o tumbado en la cama de mi dormitorio acostumbro ha hablar con el dueño y creador de mi alma.

Así con el tiempo he llegado a tener un alma satisfecha, sin problemas y una mente tranquila aparentemente sin líos.

Si el objetivo espiritual para el que he sido creado es para estar en igualdad de forma con el ser que me creó, hablando con El, a diario he llegado a tener un amigo y un confidente, he llegado así a la meta del propósito de la creación, y luego éste no me ha dejado sólo, durante los meses de verano, sino que se ha venido conmigo a tomar el fresco, por las terrazas y las cafeterías de esta ciudad.