'Eres tú', la comedia española lanzada sin promoción y sin hacer ruido que triunfa en Netflix

En el orden natural de las filmografías con calado, con poso y con futuro, lo que cuenta es la segunda película, incluso la tercera. Por muy sorprendente y furiosa que sea la ópera prima. Carlos Saura debutó con la impactante, por cruda, visión de una España sucia en 'Los golfos', pero sólo al llegar a 'La caza' definió una nueva manera de mirar. Ruben Östlund completó una estilizada visión de las heridas de la sociedad en 'The Guitar Mongoloid', pero no sería hasta 'Involuntario'o 'Play' donde rotuló su nombre como aviso de lo que vendría después. Son dos ejemplos. Otras veces, una ópera prima funda un mundo. Y ahí están Godard, Truffaut, los Coen o Tarantino para demostrarlo. Lo raro es lo de Alauda Ruiz de Azúa.

'Eres tú', la película estrenada en Netflix de la directora de 'Cinco lobitos', es de principio a fin de una intrascendencia tan lacerante que se diría rodada no tanto por director alguno como por el propio algoritmo que tanto da que hablar.

Es comedia romántica, sí, y como tal está ahí para dinamitar cualquier amago de originalidad. Es más, y sin ánimo de hacer daño, eso tan comentado de los arquetipos que soportan el patriarcado y sus miserias (que si el amor romántico, que si la búsqueda desesperada de la media naranja, que si la meritocracia de la sinceridad...) son recibidos con el entusiasmo  del que se deja llevar.

Nada en ella es nuevo porque en la raíz y sentido del propio género está el que todo suene familiar, reconocible, amable... perfectamente olvidable. A una comedia romántica se entra para sentirse reconfortado aunque sea con la mayor de las mentiras.

De hecho, las comedias románticas están ahí para engañarnos: pretenden hacernos creer que son cine y la mayoría de ellas forman parte del cupo de la publicidad. En esencia, una y otra cumplen el mismo propósito. Es decir, mentir.

Con un guion de los muy productivos Cristóbal Garrido y Adolfo Valor --capaces por igual de series como 'Reyes de la noche' y de una comedia detrás de otra como 'Cuerpo de élite', 'Los Japón' o 'Amor de madre'--, la película cuenta la historia de un hombre con poderes para predecir su futuro romántico en cuanto besa a la chica. No podían faltar esas gotas de fantástico propias del mismísimo Richard Curtis. De hecho, todo el mecanismo de la cinta remite a 'Una cuestión de tiempo' con una rara y ligeramente obscena fidelidad. Pero, en realidad, está en los genes de este género el reproducirse endogámicamente. De ahí quizá las taras. Digamos que cumplida la mitad de la película, ya se han completado todos los lugares comunes, todas las confusiones necesarias y cada una de las frases de superación personal que uno espera y desea. El polémico botón de acelerar de la plataforma se creó para argumentos como éste.

Visto con distancia, todo encaja. La película que apenas recibió atención de la cadena a la hora de promocionarla y darla a conocer (al contrario que 'Bardo' o 'Blonde' o 'Sin novedad en el frente') es ahora uno de sus productos (sí, es un producto) estrella. Su intención no es la de convertirse en acontecimiento sino en la de incorporarse al escaparate de lo consumible (se consume antes que verse). Todo normal.

Pues no, 'Eres tú' se acerca más a lo que cualquier director hace porque no le queda más remedio, para foguearse, para conocer gente en la industria, para llegar a final de mes... para debutar por fin. De otro modo, 'Eres tú' es la auténtica ópera prima de Alauda Riuz de Azúa. Y ya con ganas de ver, por fin, la tercera