La imagen que ilustra este post es inmensamente popular y muestra a la actriz italiana Sophia Loren mirando de reojo (y quizá con algo de recelo) el exuberante escote que lucía Jayne Mansfield, en aquel momento una de las sex-symbols más famosas de la Meca del Cine. La  fotografía fue tomada en 1957 durante una cena en Beverly Hills y con los años se ha convertido en icónica.

Diez años después, una de las protagonistas de esta famosa instantánea (Jayne Mansfield, a los 34 años de edad) fallecería trágicamente en un accidente automovilístico cuando el coche en el que viajaba acabó empotrado bajo el tráiler de un camión la madrugada del 29 de junio de 1967.

Jayne Mansfield viajaba en la parte delantera de un lujoso y amplio Buick Electra 225 conducido por el joven (e inexperto) Ronnie Harrison y junto a la actriz iba su compañero sentimental Sam Brody. En el asiento trasero iban durmiendo los tres hijos menores de la actriz (de los cinco que tenía).

Era de madrugada (pocos minutos antes de las 2:30) y se dirigían por la Ruta 90 (la autopista que cruza el sur de Estados Unidos) dirección a Nueva Orleans donde Mansfield debía participar en el programa de televisión ‘Midday Show’.

Posiblemente la inexperiencia del joven chofer (tenía 20 años de edad) no le permitió percatarse que en medio de la calzada había un enorme camión estacionado. El conductor del tráiler había parado en medio de la vía debido a que se acababa de rociar por aquella carretera un insecticida contra los centenares de mosquitos que por allí transitaban, lo cual formó una espesa nube que dificultaba la visibilidad.

Ronnie Harrison conducía el automóvil a gran velocidad, pues la actriz quería llegar cuanto antes a Nueva Orleans y descansar un rato en el hotel antes de ir al plató de televisión. La falta de experiencia, sumado a lo rápido que iba, hizo que no tuviese tiempo de maniobrar cuando se encontró con el camión estacionado en medio de la carretera y el automóvil acabase metido debajo del remolque.

El impacto seccionó toda la parte superior del Buick Electra 225, recibiendo los tres adultos un fuerte traumatismo que acabó con sus vidas (corrió la leyenda urbana que debido al golpe Jayne Mansfield fue decapitada, pero es una versión falsa). Los pequeños, que viajaban tumbados en la parte trasera, salvaron sus vidas, aunque tuvieron varias contusiones.

En esa época Jayne Mansfield estaba llamada a ser una de las sex-symbols de Hollywood (sobre todo tras el fallecimiento de Marilyn Monroe cinco años antes), por lo que la noticia del accidente mortal de la actriz tuvo un gran impacto mediático.

Hasta tal punto que los ingenieros de las empresas fabricantes de remolques de camión se pusieron a trabajar para diseñar algún método que evitase que, tras un choque, un automóvil acabase metido bajo el tráiler y así todo el impacto se lo llevaría la parte delantera del coche.

El resultado fue una barra de hierro que iría colocada bajo el remolque (a la altura de la parte frontal de cualquier automóvil) y que sería la que absorbería todo el impacto en caso de colisión, evitando de ese modo que el coche acabase bajo el camión.